Paso 1
Lo primero que tienes que hacer es meter la marihuana molida en el extremo de tu pipa. Asegúrate de que esté bien prensada, pero no demasiado, para no dañar sus bordes. Asegúrate de que el cogollo se mantenga en su lugar cuando inclines la pipa horizontalmente.
Paso 2
Coloca la boquilla en el centro de los labios. Tira suavemente mientras enciendes la marihuana que se encuentra en el extremo de la pipa.
Paso 3
Inhala suavemente el humo, sujétalo y disfruta la sensación de relajación. Suelta lentamente el humo cuando sientas la necesidad de exhalarlo. Golpea suavemente la pipa, lo suficiente para retirar la ceniza. Así estará lista para la siguiente calada. Como alternativa, hay otra manera de prepararlo para su próximo uso. Puedes vaciar la pipa simplemente soplando directamente por la boquilla.
Es un proceso sencillo y sin complicaciones para colocarse, pero hay algo mágico en esa simplicidad que lo hace suave y discreto.